Un trágico incidente ocurrió en una playa de Florida en Lauderdale-by-the-Sea, donde una niña de 7 años, Sloan Mattingly, perdió la vida después de que un agujero de arena se derrumbara sobre ella y su hermano de 9 años, Maddox. Los hermanos, que estaban de vacaciones en Indiana, estaban jugando en la arena cuando quedaron atrapados el martes por la tarde. Los frenéticos bañistas, incluida una enfermera registrada, trataron de sacar a los niños mientras llamaban al 911 para pedir ayuda. Los rescatistas del Cuerpo de Bomberos de Pompano Beach llegaron al lugar para encontrar al niño enterrado hasta el pecho y a la niña completamente cubierta de arena. A pesar de sus esfuerzos por reanimarla, Sloan fue declarado muerto en el Broward Health Medical Center. El niño, afortunadamente, sobrevivió y se encuentra en condición estable.

El incidente ha arrojado luz sobre los peligros de los agujeros de arena, un hecho raro pero mortal que se cobra la vida de varios niños cada año en los Estados Unidos. La Asociación Estadounidense de Salvavidas ha emitido una advertencia sobre los riesgos asociados con la excavación de hoyos profundos en la arena y aboga por un aumento de las patrullas de playa y la capacitación en respuesta a emergencias para prevenir futuras tragedias. El desgarrador evento ha dejado a la comunidad de luto y sirve como un recordatorio conmovedor de la importancia de la seguridad y la conciencia de la playa para evitar que incidentes tan devastadores vuelvan a ocurrir.